Es sorprendente que el decano del Colegio de Abogados de Madrid, el señor Alonso, un jurista de renombre, afirmara que no necesitamos una justicia feminista, sino independiente. Es mayúscula la ignorancia que tiene sobre el feminismo y más aún que diera muestras de una perspectiva de género tan alejada de la realidad del derecho en la que se mueve.
Somos gente de orden, por lo tanto ¿qué entendemos por machismo? Machismo es un infortunado conjunto de ideas y creencias sociales rancias y más antiguas que el rodapié de las Cuevas de Altamira, destinadas a ensalzar a los hombres en perjuicio de las mujeres.
¿Y qué es el feminismo? Pues un lúcido e imprescindible movimiento político que defiende sin fisuras el principio de igualdad de derechos de la mujer y del hombre, igualdad de oportunidades para la mujer y el hombre, en definitiva.
Es más que patente la pervivencia de determinados estereotipos androcéntricos en la educación de algunas generaciones, mayoritariamente en aquellas más antiguas, aunque nos siguen sorprendiendo algunos jóvenes y mujeres que se parapetan en lo “polite” o en una errónea neutralidad de no identificarse o posicionarse en una de las dos opciones y ello es debido a un grave desconocimiento e idea negativa sobre el feminismo.
El compromiso con el feminismo ha de ser firme y real por parte de toda la sociedad en pro de la tolerancia, del respeto, de la convivencia y de la ansiada igualdad, va más allá de una teoría política y social, hemos de lograr interiorizar la cualidad de ser una persona igualitaria de manera inherente, consubstancial al ser humano que forme parte de nuestra propia naturaleza y esencia. Resolución judicial para el señor Decano: tomatazo al canto y repetir cien y “cienes” de veces “Feminismo es igualdad y machismo desigualdad”.